Los implantes dentales necesitan mayor o igual limpieza y dedicación que los dientes naturales para su correcta higiene. De ahí la importancia de los 3 cepillados al día y el uso de los utensilios de limpieza dental necesarios (colutorios, superfloss, irrigadores orales, cepillos interdentales, etc).
En el mantenimiento de los implantes es tan importante el trabajo del especialista como el del paciente, que ha de ser muy responsable de su salud oral en los períodos en que no acude a la consulta.
Hay que pensar que muchas de las causas que han llevado a la pérdida de piezas dentales se reactivarán si no nos comprometemos a un cambio radical de hábitos. La falta de limpieza, tabaquismo, bruxismo, entre otras, además de la predisposición genética a una mayor o menor fortaleza de los dientes naturales, ponen en riesgo deteriorar de nuevo la salud de la boca y la viabilidad de los implantes.
Cabe destacar que cada cierto tiempo y dependiendo de diversos factores como el estado de la encía, cada caso y/o placa acumulada, deben desmontarse en clínica las prótesis para realizar tareas de higiene exhaustiva para un correcto mantenimiento de la salud de los implantes.